Según las conclusiones del estudio, los frutos secos afectan por igual a hombres y mujeres e independientemente de la edad. Tampoco supone un gran cambio el tipo de frutos secos consumidos. Lo que sí varía es el efecto según el nivel de colesterol LDL, el índice de masa corporal y la dieta. La calidad de vida puede mejorar, y mucho, gracias al consumo de frutos secos.
Los científicos que llevaron a cabo la investigación quieren aprovechar sus resultados para aconsejar la inclusión de los frutos secos en una dieta sana, dada su importancia a la hora de reducir el riesgo de sufrir enfermedades coronarias. Dadas sus propiedades y sus efectos sobre los niveles de colesterol en sangre, los investigadores aseguran que se pueden evitar problemas e gracias al consumo de frutos secos.